Alejarse de las reuniones físicas ha sido un éxito, a pesar de los trolls, dicen los organizadores.
El bloqueo del coronavirus ha llevado a la proliferación de grupos de apoyo en línea para personas que enfrentan problemas con las bebidas, y organizaciones como Alcohólicos Anónimos también tienen que lidiar con reuniones secuestradas por trolls.
La respuesta de AA y otras organizaciones se produjo cuando una de las principales organizaciones benéficas de alcohol dijo que la cuarentena presentaba un “disparador casi constante” para la recuperación de alcohólicos que ya luchaban contra la forma en que asociaban el hogar con el consumo de alcohol.
Con el cierre de todas sus reuniones físicas, la reunión en línea funcionaba “extremadamente bien” según un portavoz de AA, quien agregó que la organización se estaba ejecutando en el mismo formato que involucraba una duración fija y con funciones asistenciales de una secretaria.
“Una reunión que acabo de tener: tenía dos miembros de fuera del Reino Unido, uno de Vietnam y otro en Australia”, dijo Peter. “Hemos tenido reuniones en línea durante varios años, pero anticipamos que incluso más personas usarán esta forma de medio. Muchos dicen lo agradecidos que están ”.
Sin embargo, AA ha tenido que emitir pautas y consejos sobre cómo asegurar la popular aplicación de reuniones de video Zoom, y evitar que las sesiones sean “secuestradas” por lo que describió como “malos actores”.
Las directrices, que incluyen el uso en línea salas de espera y teniendo cuidado de no incluir AA en el título de reuniones celebradas prácticamente en público, expresan: “Por supuesto, nada impide que se levanten la mano y una vez llamados inicien su jerga obscena, pero al menos es solo una persona, muy fácil de prohibir y no dejar entrar nuevamente por el resto de la reunión. Al igual que lo que sucede en reuniones reales a veces “.
La AA advierte a los miembros que esperen “pornografía explícita y obscena, imágenes obscenas, lenguaje grosero y abuso verbal (a menudo dirigido al líder / presidente para invocar el caos). En primer lugar, mantengan la calma, ya que se esperaba experimentar esto. Pero si está tranquilo, puede actuar rápida y decisivamente en lugar de reaccionar “.
Ben, propietario de un pub del suroeste de Inglaterra que pasó un mes en rehabilitación antes de Navidad para tratar de superar un hábito de alcohol de 30 años, agradeció la prevalencia de los foros en línea, pero le preocupaban los informes de trolling de otros usuarios.
“He oído hablar de personas que vienen a las reuniones de Zoom, se desnudan o abren una lata de alcohol y simplemente se sientan allí”, le dijo al Guardian. “Se comunican entre sí antes y luego se conectan en línea en grandes cantidades, por lo que es realmente difícil encontrarlos y bloquearlos”.
Dijo que había permanecido sobrio desde que comenzó la cuarentena, a pesar de los desafíos: “El autoaislamiento es la excusa perfecta para tomar una copa. Si estuviera bebiendo en este momento, estaría completamente fuera de control. Sería algo que realmente necesitaría y desearía, así que encontraría la manera de conseguirlo “.
El Dr. Richard Piper, director ejecutivo de la organización benéfica Alcohol Change UK, dijo que el sector de tratamiento se había adaptado muy rápidamente al aislamiento. Además de AA, Smart Recovery, otra organización internacional, está reclutando facilitadores adicionales para ejecutar reuniones temporales en línea a medida que avanza la crisis de Covid-19.
“Pero aún esperamos ver desafíos cada vez mayores para las personas que se han recuperado a medida que esto sucede”, dijo Piper, quien habló de cómo la naturaleza de la cuarentena estaba generando una presión inmensa sobre las personas que habían establecido nuevas rutinas como parte de su recuperación.
“Desafortunadamente, la gran mayoría de los problemas con el alcohol se relaciona con personas que beben en casa. Si su hogar es un lugar que asocia con la bebida, entonces trabaje muy duro para no asociarlo con eso. Pero si estás atrapado en esa casa, esencialmente de lo que estamos hablando, son de desencadenantes constantes “.Michael Rawlinson, consultor de tratamiento en Clouds House, un centro de tratamiento de adicciones, dijo que había visto una respuesta positiva a su programa de recuperación, con reuniones más frecuentes, mayor asistencia y una mayor distribución geográfica.
“Hemos tenido personas accediendo a nuestras reuniones en línea desde lugares como Chicago, personas de todo el mundo entrando y saliendo”, dijo Rawlinson. “Donde generalmente tenemos 20 o 30 personas, ahora tenemos tres veces esa cantidad”.
Publicado originalmente en The Guardian
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